El 6 de Octubre de 2008 fue el día exacto en el que comencé con este extraordinario proyecto. El primer día estaba muy nerviosa, temía que la reacción de los niños no fuera la esperada. Sin embargo, no fue tan malo...los niños, aunque inquietos, se mostrarón muy atentos a las instrucciones que les dabamos. Al final de la clase sentí un gran alivio, y también me sentí motivada, ya quería dar la siguiente clase. :)
Durante este mes se trabajaron los colores, rojo, amarillo, verde y azul. Las clases se dividieron en dos períodos: en los primeros 15 minutos cantábamos y bailábamos junto con los niños; y el resto de la clase les hacíamos la explicación y los niños hacían un trabajito (colorear, dibujar) de acuerdo al color que se veía en clase.
Mis primeras observaciones fueron las siguientes: me percaté de que había niños a los que se les dificultaba prestar atención, y otros para los cuales resultaban muy sencillas las actividades y aprendían fácilmente los colores.
Creo que este mes fue el más difícil, pues mi compañera Aurora y yo tardamos un poco en adaptarnos al modo de trabajo, y también en crear una estrategia para lograr que TODOS los niños pusieran más atención. Esta estrategia la implementamos en el mes siguiente...